05-04-2022 – Protección del Patrimonio Natural y Cultural, material e inmaterial, con reconocimiento UNESCO

Para la UNESCO el patrimonio es el legado cultural que recibimos del pasado, que vivimos en el presente y que transmitiremos a las generaciones futuras. Y ha establecido, en la Convención de 1972 para la Protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural, que ciertos lugares de la Tierra tienen un “valor universal excepcional” y pertenecen al patrimonio común de la humanidad, como monumentos, espacios naturales o expresiones vivas heredadas de nuestros antepasados. Todas ellas conforman nuestro patrimonio material e inmaterial, que representan un importante factor del mantenimiento de la diversidad cultural, y que se erigen en facilitador y motor de las dimensiones económica, social y ambiental del desarrollo sostenible.
Esta actividad, de carácter cultural, realizada conjuntamente por varios centros asociados a la UNED del Campus Sur, pretende dar a conocer sitios del patrimonio natural y/o cultural, material e inmaterial, existente en el territorio de los centros pertenecientes a dicho campus, que cuenten con reconocimiento UNESCO para su preservación para las futuras generaciones, por tanto, que estén inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial.
Para que pueda inscribirse un sitio en dicha lista debe poseer fenómenos naturales notables, representar alguna de las principales etapas de la historia de la Tierra, mostrar principios ecológicos y biológicos significativos o contener entornos naturales importantes. La Convención del Patrimonio Mundial otorga reconocimiento internacional a más del 10% de la superficie total de las áreas protegidas del mundo y aporta una protección vital a los recursos naturales más importantes de nuestro planeta.
Tal y como recoge su sitio oficial www.unesco.org, el patrimonio cultural representa el legado cultural que recibimos del pasado, que vivimos en el presente y que transmitiremos a las generaciones futuras. Se diferencia entre material e inmaterial, o tangible e intangible.
El patrimonio cultural inmaterial o “patrimonio vivo” se refiere a las prácticas, expresiones, saberes o técnicas transmitidos por las comunidades de generación en generación.
El patrimonio inmaterial proporciona a las comunidades un sentimiento de identidad y de continuidad: favorece la creatividad y el bienestar social, contribuye a la gestión del entorno natural y social y genera ingresos económicos. Numerosos saberes tradicionales o autóctonos están integrados, o se pueden integrar, en las políticas sanitarias, la educación o la gestión de los recursos naturales.
Por su parte, con la protección del patrimonio natural se pretende preservar la biodiversidad de nuestro planeta, lo cual resulta fundamental para el bienestar de la humanidad. Gracias al apoyo de la Convención del Patrimonio Mundial, los sitios naturales más importantes gozan de reconocimiento internacional y de asistencia técnica y económica para combatir amenazas como la tala indiscriminada para hacer cultivos, la introducción de especies exóticas y la caza furtiva.
Actualmente, 193 países han ratificado la Convención del Patrimonio Mundial, y forman parte de una comunidad internacional unida en la misión conjunta de identificar y proteger el patrimonio natural y cultural más importante de nuestro planeta. La Lista del Patrimonio Mundial incluye en la actualidad un total de 1.121 sitios (869 culturales, 213 naturales y 39 mixtos) en 167 Estados Partes.
La Convención es única, porque liga el concepto de conservación de la naturaleza con la preservación de los sitios culturales. Gracias a la inestimable ayuda de las comunidades locales, la Convención es una herramienta eficaz que permite afrontar los desafíos contemporáneos relacionados con el cambio climático, la urbanización descontrolada, el turismo de masas, el desarrollo socioeconómico sostenible y las catástrofes naturales.
La Convención de la UNESCO de 2003 para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial tiene como objetivo la conservación de este frágil patrimonio; también pretende asegurar su viabilidad y optimizar su potencial para el desarrollo sostenible. La UNESCO brinda su apoyo en este ámbito a los Estados Miembros mediante la promoción de la cooperación internacional para la salvaguardia, y estableciendo marcos institucionales y profesionales favorables a la preservación sostenible de este patrimonio vivo.