13-12-2019 – Infancia, escolaridad y funciones ejecutivas: evaluación y desarrollo (Segunda edición)

Las funciones ejecutivas suelen definirse, en términos globales, como un amplio abanico de operaciones cognitivas interrelacionadas y con diferente evolución a lo largo del desarrollo. En general, en la etapa de la Educación Infantil, ya se pueden identificar dimensiones de las funciones ejecutivas como la inhibición, memoria de trabajo y flexibilidad. También, comienzan a emerger otras dimensiones vinculadas con la capacidad de organizar y planificar una tarea, autorregular y controlar la conducta, etc. Todos estos procesos cognitivos son importantes para resolver problemas de manera eficaz y eficiente, para rendir en las áreas instrumentales básicas (lectura, escritura y matemáticas) y para facilitar el comportamiento adaptativo en el contexto en los que se desarrolla el niño (familia y escuela).

Las funciones ejecutivas pueden ser evaluadas mediante cuestionarios en formato heteroinforme respondidos por padres o profesores (ejemplo, BRIEF-P) o bien mediante baterías de evaluación neuropsicológicas infantiles (ejemplo, Luria Inicial o K-BIT).

La importancia de una correcta evaluación de todas las funciones ejecutivas en la etapa de Educación Infantil reside en la identificación de fortalezas y debilidades, de cara a una intervención psicopedagógica temprana, ajustada y personalizada a cada niño, facilitando y contribuyendo a su adaptación personal, escolar y social.

BRIEF-P es un cuestionario – recientemente validado en España por Bausela y Luque (Gioia, Espy y Isquith, 2016) – que permite evaluar las funciones ejecutivas a través de la observación de informantes – profesores u otros cuidadores habituales del niño (versión heteroinforme)- en niños de 2 años a 5 años y 11 meses. Su aplicación requiere 10-15 minutos. Permite obtener un perfil de las funciones ejecutivas del niño en desarrollo, a través de (Índice global de Función Ejecutiva, Índice de Autocontrol Inhibitorio, Índice de Flexibilidad, Índice de Metacognición Emergente) y escalas relacionados con las funciones ejecutivas (Inhibición, Flexibilidad, Control Emocional, Memoria de Trabajo, Planificación y Organización).

Destacamos los siguientes aspectos de BRIEF-P: (I) Es sensible a la plasticidad implícita en la neuropsicología del desarrollo. (II) Los destinatarios potenciales de este instrumento de evaluación‐diagnóstica son niños con afectación en el funcionamiento ejecutivo, atribuido a una etiología diversa (adquiridos – desarrollo): trastornos del lenguaje, trastornos del espectro autista… (III) Es breve, en 10‐15 minutos se puede obtener un perfil del funcionamiento ejecutivo. (IV) Resalta y destaca por su validez ecológica, al permitir evaluar en contextos naturales en los que se desarrolla el niño/a (casa y escuela) y el carácter heteroinforme al ser aplicado por los propios padres y profesores. (V) Disponible en euskera.

Finalmente, es necesario conocer pautas para diseñar propuestas de intervención psicopedagógica dirigidas a desarrollar las funciones ejecutivas, así pautas para orientar a padres y /o maestros a aplicar en los contextos en los que se desarrolla el niño (familia y escuela) estimulando su desarrollo (intervención primaria).

  • Lugar: Centro Asociado de Tudela
  • Fecha y hora: Del 13 al 14 de diciembre de 2019. Viernes de 16:00 a 21:00 y sábado de 9:00 a 14:00h.
  • El presente evento es difundido a través de la Plataforma AVIP y recibe el soporte técnico de INTECCA.
  • En el siguiente enlace encontrarás más información.