El incremento de la violencia escolar preocupa al profesorado, que no sabe cómo gestionarla. Las herramientas que hemos reunido en este curso como el coaching, pedagogías queer, mediación y las otras didácticas, persiguen los objetivos de contribuir a formar para manejar las emociones, comenzando por la propia respuesta del docente ante el conflicto, detectar y resolver el acoso escolar; así como educar para la formación integral del alumnado, al que hay que motivar para que participe en el proceso educativo. En suma, una modalidad de educación idónea para el siglo XXI, capaz de prevenir las manifestaciones emergentes de riesgo social, de erradicarlas y de fomentar una convivencia democrática e igualitaria.