Millones de personas se ven obligadas cada año a abandonar su hogar a causa de la guerra, la persecución política, el crimen organizado, los desastres naturales, la degradación ecológica, la falta de medios para ganarse la vida u otras situaciones que ponen en peligro su vida o su libertad.
A lo largo de la ruta que comprende la salida de su lugar de origen, el tránsito y la llegada a un destino más seguro, estas personas sufren distintas formas de violencia y una constante vulneración de sus derechos.
ALBOAN, ONG de desarrollo de los Jesuitas en País Vasco y Navarra, colabora con el Servicio Jesuita a Migrantes de México, con el Equipo de Reflexión e Investigación y Comunicación, ERIC, de Honduras y con el Servicio Jesuita a Refugiados-Europa para ofrecer atención a las personas que huyen de sus países en busca de un futuro en paz y seguridad.
A través del objetivo de Iván Benítez nos acercaremos a las historias de todas esas personas y familias que huyen en busca de un destino seguro y digno. Son historias que nos llegan desde Centroamérica, donde miles de personas emprenden un peligroso camino desde el Triángulo Norte de Centroamérica -Honduras, Guatemala y El Salvador- hacia el norte del continente a través de México. Son también las historias de miles de familias sirias que llegan a Líbano y Grecia huyendo de una guerra que comenzó en 2011 y que dura demasiado. Se trata de dos caras de la misma moneda que nos recuerdan que es hora de abrir los ojos a esta realidad y de convertir las fronteras en puentes de solidaridad.